El uso de fármacos para mejorar la capacidad cognitiva entra de lleno en las empresas. Si bien en algunos trabajos podrían ser necesarios, su generalización posee ribetes poco éticos.

Barbara Sahakian, The Conversation / Vivimos en un mundo cada vez más competitivo en el que estamos siempre en busca de obtener una ventaja sobre diversos rivales, no pocas veces, nuestros propios colegas en el trabajo. En algunos casos, esto puede empujar a la gente hacia métodos extremos, poco éticos e ilegales,  algo que hemos visto recientemente en el escándalo de doping que ha golpeado el mundo del atletismo. En un artículo reciente, encontramos que las personas está utilizando cada vez más las drogas que mejoran el rendimiento para tareas comunes que van desde rendir examen, dar presentaciones y llevar a cabo negociaciones importantes. Estos fármacos, calificados como "potenciadores cognitivos",  tales como antidepresivos, betabloqueantes (utilizados para tratar enfermedades del corazón o la ansiedad) o “drogas inteligentes”, pueden aumentar la energía y el estado de ánimo, lo que nos ayuda a obtener mejores resultados con menos horas de sueño. Pero ¿es seguro para las personas sanas que toman estos fármacos? Y, sobre todo, ¿es correcto?

Las drogas inteligentes incluyen el modafinil (comúnmente utilizado para tratar los trastornos del sueño) y el metilfenidato, también conocido como Ritalin (usada para tratar el TDAH). Estos fármacos nos hacen más atentos, concentrados y despiertos, por lo que es fácil ver por qué son tan populares. Sucede que en la economía del conocimiento necesitamos cerebros dinámicos y flexibles para sobresalir en nuestro lugar de trabajo. Los nuevos trabajos son demandantes y requieren que seamos adaptables y capaces de tomar decisiones bajo presión (en el tiempo) y altos niveles de riesgo. Tenemos que estar atentos, tener buena memoria y grandes habilidades para la planificación y el resolver problemas,  también la capacidad de leer y comprender otros puntos de vista. El mantenimiento de la motivación y la capacidad de resistencia en situaciones difíciles y el estrés también se suman a estos ingredientes clave.

¿Resultado? Muchos toman fármacos que los ayudan a tener estas capacidades. Por eso, sólo estamos empezando a comprender cuán extendido está el uso de drogas inteligentes. En una encuesta en línea, hecha durante 2008 por la revista Nature, a 1.400 personas en 60 países, uno de cada cinco informaron que estaban usando drogas que proveen mejoras cognitivas para estimular su atención, concentración o la memoria. Este estudio analizó específicamente el uso de beta bloqueadores, Ritalin y modafinilo.

Mientras tanto, una encuesta de 2015 de unos 5.000 trabajadores de una compañía de seguros de Alemania estima que alrededor de 6,7% usaban drogas para mejorar su rendimiento o hacer frente a la ansiedad, frente a 4,7% en 2009. Sin embargo, el número real podría ser mucho mayor, ya que algunos las personas pueden ser reacias a reportar dicho uso. Los estudios también han estimado que alrededor del 10% a 15% de los estudiantes de todo el mundo utilizan potenciadores cognitivos incluyendo Ritalin y modafinil.

Estudiantes universitarios y académicos por lo general dicen que usan potenciadores cognitivos, por tres razones principales: para obtener una ventaja competitiva; para superar los efectos del jet lag o la falta de sueño, con el fin de permanecer despiertos y alerta s, y para rendir al máximo nivel.  Finalmente, también para aumentar la motivación relacionada con el trabajo.

Sabemos que si las tareas son aburridas, es difícil entrar en el flujo - y mucho más fácil para posponer las cosas y navegar por nuestros sitios web favoritos en su lugar.

En mi propio laboratorio, hemos evaluado los efectos tanto de modafinil y el metilfenidato (Ritalin). Vimos mejoras en una amplia variedad de las funciones cognitivas, incluyendo la atención sostenida o la concentración, la memoria, la planificación y la resolución de problemas. Además, el modafinilo, realza el placer o la motivación relacionada con la tarea.

Pero no se trata sólo de mejorar el rendimiento en "puestos de trabajo de todos los días". Para ciertos miembros de nuestra sociedad, tales como los médicos o los que están en el control del tránsito aéreo, drogas para mejorar la capacidad cognitiva como el modafinil podría llegar a ser salvadores. De hecho, hemos encontrado que los médicos privados de sueño podrían beneficiarse de modafinilo en situaciones que requieren un procesamiento eficiente de información, el pensamiento flexible y toma de decisiones bajo presión de tiempo.

En estos estudios con modafinilo, los efectos secundarios son relativamente bajos. Pero mientras todo esto suena positivo, se trata de los primeros estudios sobre un número limitado de personas. Dado el creciente uso de tales drogas, necesitamos con urgencia investigaciones a largo plazo de su seguridad y eficacia para su uso por personas sanas.

Juegos y estimulación cerebral

Por supuesto, las drogas no son la única forma de aumentar nuestras capacidades cognitivas. También ha habido una proliferación de juegos de "entrenamiento cerebral", muchos de los cuales hacen afirmaciones que son difíciles de verificar. El año pasado, mis colegas y yo demostramos cómo un juego, basado en datos científicos, se podría utilizar para mejorar la memoria en pacientes con esquizofrenia. Con un desarrollador de juegos, hemos creado El Mago Juego de Memoria, que se ejecuta como una aplicación en tabletas o teléfonos móviles.

Los dispositivos de estimulación cerebral no invasiva ahora también están siendo utilizados por las personas sanas. Por ejemplo, "la estimulación transcraneal de corriente directa", que utiliza electrodos colocados en el cuero cabelludo para pasar una corriente eléctrica de baja. Esto puede ser capaz de acelerar el proceso de aprendizaje - que incluso estamos viendo los jugadores de vídeo que utilizan esta tecnología para obtener una ventaja competitiva.

Si nada de esto suena atractivo, hayuna solución de baja tecnología para aumentar artificialmente la "inteligencia": el ejercicio. Este estimula la producción de nuevas células cerebrales y mejora la cognición, el estado de ánimo y la salud física y, por lo tanto, un mejor bienestar general.

Si bien no existe razón por la que debemos promover mejoras en la salud del cerebro y el bienestar mental a nivel mundial, el uso de potenciadores cognitivos que sólo se pueden comprar o acceder ilegítimamente, como Ritalin, es peligrosa y controversial. Algunos estudiantes se ven forzados a utilizar drogas para mejorar el cognitivas, porque ven a otros estudiantes hacerlo y no quieren quedarse atrás.

En respuesta a los estudiantes afectados, la Universidad de Duke modificó su código de honor en 2011 para afirmar que "el uso no autorizado de medicamentos con receta para mejorar el rendimiento académico" era una forma de engaño. Así, hasta que estos fármacos potenciadores cognitivos están aprobados para su uso por personas sanas, lo mejor es utilizar otros medios para aumentar la cognición. Tal vez también es el momento de considerar cómo podemos promover mejor el bienestar mental de una sociedad más floreciente.