La administración Trump dijo que les permitiría a los estados exigir que algunos receptores de Medicaid trabajen o participen en actividades comunitarias como voluntariado o capacitación laboral como una condición de elegibilidad para el programa gubernamental de seguro de salud para los pobres.

Los Centros para Servicios de Medicare y Medicaid emitieron una guía que facilita a los estados diseñar y proponer programas de prueba que implementen dichos requisitos. Los estados deben proponer dichos cambios a través de exenciones y recibir aprobación federal.

Seema Verma, la administradora de la agencia, dijo que la orientación de política surgió en respuesta a solicitudes de al menos 10 estados que han propuesto que algunos receptores de Medicaid trabajen o participen en actividades que pueden incluir capacitación, educación, búsqueda de trabajo, voluntariado o cuidado. Esos estados incluyen Kentucky, Maine, New Hampshire, Arizona, Indiana y Utah.

Ciertas poblaciones de Medicaid estarían exentas de las reglas, incluidas las personas con discapacidades, los ancianos, los niños y las mujeres embarazadas. Verma también dijo que los estados tendrían que hacer "modificaciones razonables" para aquellos que luchan contra la adicción a los opiáceos y otros trastornos por uso de sustancias.

"Esto nos da un camino para comenzar a aprobar exenciones", dijo Verma en una llamada telefónica con reporteros el miércoles. "Se trata de ayudar a esas personas a salir de la pobreza".

Bajo la Ley de Cuidado de Salud Asequible de 2010, el logro de política nacional del ex presidente demócrata Barack Obama comúnmente conocido como Obamacare, 31 estados ampliaron Medicaid a aquellos que componen hasta el 138% del nivel federal de pobreza, agregando millones de personas a las listas.

Los republicanos repetidamente no han revocado y reemplazado a Obamacare, una de las principales promesas de campaña del presidente Donald Trump. En cambio, la administración Trump ha intentado debilitar el programa a través de órdenes ejecutivas y reglas administrativas.

La administración de Obama se opuso a los esfuerzos del estado para implementar requisitos de trabajo en Medicaid porque podría resultar en un menor número de personas que tengan acceso a un seguro de salud.

Por ejemplo, Kentucky el año pasado propuso requisitos de trabajo para adultos sanos para obtener un seguro y establecer nuevas tarifas para todos los miembros en función de los ingresos. Un estudio encontró que la propuesta reduciría la cantidad de residentes en Medicaid en casi 86.000 en cinco años, ahorrando más de US$ 330 millones.

Los republicanos argumentan que Medicaid fue creado para servir a los más vulnerables y que se infló bajo Obamacare. Verma y otros republicanos dijeron que la implementación del trabajo y los requisitos de participación comunitaria podrían ayudar a mejorar los resultados de salud al conectar a las personas con trabajos y capacitación.