El desafío del e-commerce farmacéutico post COVID-19

Martes, 14/07/2020
Por Álvaro Ramírez, Country Manager de VTEX Chile.
Álvaro Ramírez

La vida no va a ser la misma cuando entremos en una nueva normalidad. En el mundo post COVID-19. En lo que le compete a VTEX, que es la tecnología, el virus provocó un fuerte empujón hacia la innovación, y los hábitos de consumo, la medicina, la educación, van a dar un salto relevante hacia lo que podríamos llamar el futuro. Pero dentro de este contexto, el sector farmacéutico, absolutamente relevante para enfrentar los nuevos desafíos, se está generando una brecha que es necesario acortar rápidamente. 

Recién en enero de este año el Gobierno emitió un decreto y un plan para regular su comercialización de manera electrónica. Con esto, será posible ingresar la receta y una farmacia virtual haría el despacho a la dirección correspondiente. 

Pero eso en el papel. Las farmacias tienen hoy una tremenda oportunidad para tomar el control de la operación, la experiencia de los clientes, sus datos y segmentación, más que delegar esa responsabilidad a terceros. Así lograrán además controlar la alta demanda que se viene en el canal digital hacia adelante. 

Luego de hacer una revisión de las tres principales cadenas de farmacias, vemos que hay un amplio campo para avanzar o potenciar. Una de ellas programa el despacho desde los 12 días siguientes a la compra. Otra los está haciendo en un razonable tiempo de dos días, pero solamente segmentado a ocho ciudades de Chile. Y una tercera está despachando en ocho días, pero a través de un tercero, delegando el control de la experiencia de clientes. ¿Qué pasa entonces con la labor social de democratizar el e-commerce, más aún en un segmento estratégico, como es la entrega de medicamentos? Efectivamente, las farmacias tienen demasiado que aportar en este sentido.    

Visto desde otro ángulo, según un estudio de Hermann Consultores, en 2019 el 46% de las farmacias privadas, farmacias populares o almacenes farmacéuticos, se concentra en la Región Metropolitana, con una ausencia absoluta en algunas comunas, principalmente en la zona norte. Un sistema de e-commerce también sería la solución para hacer llegar esos medicamentos a las personas que no tienen un acceso más expedito. 

La invitación acá es adoptar la omni-canalidad como un factor clave en la aceleración de sus estrategias digitales, aprovechar la capilaridad geográfica con miles de locales a lo largo del país, en barrios cercanos a los domicilios de los clientes, para hacer entregas económicas rápidas en 30 minutos, en vez de despachos centralizados desde un centro de distribución en Santiago. Esto es un tremendo desafío que requiere convicción y por supuesto inversión, pero hoy más que nunca la situación y coyuntura está exigiendo estos cambios de forma urgente.

Comentarios