El Departamento de Salud Pública de California (CDPH) hizo un llamado a evitar los riesgos relacionados con la radiación electromagnética de los equipos móviles.
Dos estudios sobre los efectos nocivos de los teléfonos móviles, liderados por los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU., no descartaron una conexión, pero la matizan.
En 2010 la Universidad de Stanford (California, Estados Unidos) reveló un estudio que ponía los pelos de punta: la superficie táctil de estos dispositivos contenía 18 veces más microorganismos que un inodoro público. Y peor: el 33% de las bacterias quedaban impregnadas en las yemas de los dedos.