Lo que hace tan peligroso a este insecto es su capacidad de transmitir virus y otros parásitos causantes de enfermedades como el Zika, fiebre amarilla y dengue.

Esta enfermedad es particularmente sensible a los cambios de clima, ya que la temperatura afecta la proliferación y actividad del vector y la replicación del virus en el mismo.

Según el organismo, durante las visitas preventivas realizadas entre el 5 y 19 de mayo de este año, se “observaron inconvenientes en la fumigación, vigilancia epidemiológica, diagnóstico de laboratorios, así como la falta de insumos, materiales, medicamentos e inoperatividad de equipos, entre otros”.

El centro de alta complejidad, que se realizará bajo la modalidad de alianza público privada, se ubicará en un área de 50.000 metros cuadrados.

El infectólogo del Hospital III José Cayetano Heredia de EsSalud, Arnaldo Lachira, resaltó la importancia de acudir a los centros de salud ante la presencia de fiebre mayor a 38 grados y dolor del cuerpo.

La titular del sector se dirigió a la población y exhortó a que abran sus puertas a los fumigadores, reconocer los sitios donde colocan sus huevos los zancudos que transmiten la enfermedad y si tienen algún síntoma vinculado a ésta, acudir de inmediato a un establecimiento de salud.

El país vivió en 2016 una epidemia de las tres enfermedades, con el segundo mayor número de casos de dengue desde 1990, y récord en zika y chikunguña.

El jefe del Instituto Nacional de Salud, Luis Suárez Ognio, ratificó que no se han reportado casos de virus Mayaro y virus Oropuche en las zonas de emergencia de la costa peruana, afectadas por lluvias intensas, inundaciones y huaicos.

Especialistas recomiendan evitar sobre todo la automedicación en épocas de desastres naturales que es cuando aparecen estas enfermedades.