Este ácido graso es el protagonista de las campañas de marketing de muchos productos que prometen mejorar tu salud cardiovascular o simplemente mejorar tu calidad de vida.
Investigadores descubrieron que el daño al sistema microvascular, causado a menudo por la hipertensión arterial o la diabetes, y empeorado por el hábito de fumar, está relacionado con un mayor riesgo de depresión entre las personas de 40 años o más.