Desde ahora los españoles podrán saber si están infectados por el VIH dentro de sus casas, sin necesidad de ir a un centro de salud o un hospital, tal y como las mujeres se hacen las prueba de embarazo o los diabéticos se hacen el test de glucosa en la sangre. Esa fue la decisión autorizada este lunes por el Ministerio de Sanidad al permitir que las farmacias del país ibérico vendan sin ningúna prescripción médica la prueba rápida. El objetivo de esta medida es diagnosticar rápidamente y acelerar un tratamiento adecuado para las personas infectadas. 

En solo 20 minutos, la prueba analiza las muestras de sangre o saliva y arroja un resultado. Tiene un porcentaje del 99,5 % de que un sujeto infectado obtenga un resultado positivo y un 99,9 % de que alguien que no tenga VIH obtenga uno negativo. Es decir que la sensiblidad y especificidad del test es alta con el fin de romper la cadena de transmisión del virus. 

El éxito de este innovador producto, según el gobierno español, está en un convenio de colaboración firmado en octubre de 2017. En este participaron funcionarios de la cartera de salud y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos. Ambas instituciones se comprometieron en la elaboración de una Guía de actuación farmacéutica para que los usuarios de la prueba tengan claridad sobre su uso. 

De esa manera las personas podrán saber qué es la prueba y qué permite detectar, posibles resultados, su significado, confirmación del resultado en un laboratorio clínico, donde dirigirse para más información y realización de otras pruebas, etc.