Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis encontraron en ratones que el tratamiento con antibióticos reduce el tamaño de las lesiones provocadas por la endometriosis.

En un estudio en ratones, los investigadores encontraron que algunos microbios intestinales vinculados con problemas del intestino también figuran de manera prominente en la endometriosis. Cuando trataron a los ratones con el antibiótico de amplio espectro, metrodinazol, las lesiones se redujeron, al igual que la inflamación.

Y esto resultó así sin importar que el tratamiento comenzara antes de que las lesiones empezaran a formarse o después de que la endometriosis estuviera bien establecida.

Otros antibióticos probados en el estudio, como la ampicilina, la neomicina y la vancomicina, no redujeron la inflamación ni las lesiones. Además, los investigadores encontraron que los niveles de un tipo de bacteria intestinal protectora eran muy bajos en los ratones con endometriosis, de modo que consideran que además de los antibióticos, podrían usarse probióticos para mejorar los niveles de bacterias protectoras.

El estudio señala además que las bacterias en la microbioma intestinal podrían ayudar a impulsar o a prevenir la progresión de la enfermedad.

"Este estudio es emocionante porque abre nuevas fronteras para identificar las bacterias candidatas que pueden favorecer la endometriosis en las mujeres en edad reproductiva, y nos permite realizar estudios futuros encaminados a desarrollar formas más simples para diagnosticar la endometriosis", dijo una de las autoras del estudio, Indira Mysorekar, profesora de ginecología y obstetricia y profesora de patología e inmunología.

Los investigadores están planeando una gran prueba clínica de varios centros para probar el metrodinazol en mujeres que padecen esta dolorosa enfermedad.

La endometriosis es un problema crónico para alrededor de 10% de las mujeres de entre 25 y 40 años de edad. Se cree que cerca de cinco millones de mujeres en Estados Unidos y alrededor de 176 millones de mujeres en todo el mundo son afectadas.

El estudio fue publicado hoy en línea en la revista Human Reproduction.