Héctor Garín: “En la medicina no todo puede ser negocio”

Jueves, 22/11/2018
El secretario General de la Asociación de Médicos de la Actividad Privada (AMAP) en Argentina, indica que para frenar el surgimiento de médicos falsos en el país, deberían existir controles más estrictos por parte del Estado.
Cristián Yáñez W.

Hace unos meses Argentina vivió una problemática a nivel de sus profesionales médicos que preocupó a las autoridades sanitarias. Se trató de los llamados “médicos falsos” que ejercían la profesión de manera ilegal o sin contar con un título (diploma). Hubo alertas de brasileños, bolivianos y argentinos, trabajando de esta forma.

Esta especial situación ha sido denunciada en el Gran Buenos Aires, especialmente en ambulancias y clínicas, según informa la Asociación de Médicos de la Actividad Privada (AMAP), gremio que agrupa a los profesionales de la salud en el sector privado a nivel nacional.

El Secretario General de la asociación, Héctor Garín, comenta que existe una falta de control de parte de los ministerios de Salud, “tanto Nacional como Provincial”.

Y agrega que la situación de estos profesionales falsos se ve favorecida por “la falta de registración de los médicos que están en negro, quienes se desempeñan sin contar con todos los derechos que implica una relación de dependencia (aguinaldos, licencias pagas, aseguradoras de riesgos de trabajo o ART, días por capacitación, etc.)”.

- ¿Cómo puede afectar un médico falso la salud de un paciente?

- Cualquier persona que asuma un rol de médico sin los conocimientos necesarios para resolver problemas de salud, además de incurrir en una usurpación de título, pone en riesgo la salud de los pacientes ya que no puede interpretar correctamente los síntomas y signos de la enfermedad que padece, por un lado, si tiene la osadía de indicar medicación, puede empeorar el cuadro o puede atrasar el tiempo de recibir la medicación correcta.

- ¿Cómo se puede regular mejor el sistema de salud para evitar que puedan trabajar estos pseudo doctores?

- El sistema de salud en el caso de Argentina debe mejorar sensiblemente los controles a través de mecanismos de inspecciones y auditorías que debiera ejercer el Estado, responsable primario de esta situación, además de obligar a los empleadores de médicos a extremar los cuidados sobre las personas que contratan, además creo que el modo de contratación, si se cumpliera la ley de contrato de trabajo y los médicos estuvieran todos bajo relación de dependencia, se impedirían estas irregularidades.

- ¿Por qué muchos médicos trabajan sin título, hay forma de solucionarlo? ¿Esto ocurre en otros países de la región?

- En la Argentina dada esta anarquía administrativa y la falta de controles ciertos y eficientes evidentemente existen, seguramente en otros países latinoamericanos suceden los mismos inconvenientes, de hecho, muchos de los pseudomédicos son latinoamericanos, no argentinos.

- ¿No es conveniente tener médicos sin título ante la falta de especialistas?

- No puede ser nunca conveniente una situación que contemple la existencia de pseudoprofesionales sin títulos por falta de especialistas. Hay que favorecer la formación del especialista a través de beneficios, mejor paga, buenas condiciones de trabajo, capacitación, etc. Y no someter a la población al riesgo de ser atendido por un delincuente.

- ¿Qué responsabilidad tienen, los hospitales o clínicas que contratan a médicos sin tener los antecedentes de sus estudios, diploma, etc.?

- Son muy responsables ya que, por ganar mas dinero, aceptan personas que ocupan el lugar de un médico, independientemente de los riesgos que corren las personas. En la medicina no todo puede ser negocio, los financistas que se metieron en la salud van provocando lentamente la degradación del sistema.

La AMAP monitorea constantemente las condiciones laborales de los trabajadores de la salud, ya que, como indica Garín, “las exigencias a las que son sometidos los médicos y el posible impacto en su salud personal, sin dudas pone en riesgo uno de los capitales más importantes que tiene el país, la salud de toda la sociedad”.

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