México: Sector farmacéutico negocia impulso estratégico con Secretarías de Economía y Salud

Miércoles, 08/06/2016
Más allá de una visión meramente de salud, la industria busca que se le reconozca su contribución en el crecimiento de la economía nacional.
 El Economista/María Alejandra Rodríguez. La industria farmacéutica se encuentra en conversaciones con las Secretarías de Economía y Salud para considerar al sector como un factor estratégico de las finanzas nacionales.

Las conversaciones de la industria, integrada por la Asociación Nacional de Fabricantes de Medicamentos (Anafam), la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), y la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (Canifarma), se han enfocado en seis pilares, integrados por el desarrollo regional; fortalecimiento de la cadena productiva; innovación e investigación; comercio exterior; abasto institucional y atracción de inversiones, adelantó en entrevista a El Economista, Rafael Gual Cosío, presidente de la Canifarma.

Tras la inauguración de la quinta edición del foro Vector Pharma, explicó que los seis pilares que se encuentran en conversación con las dependencias federales son “acciones y prioridades definidas para implementar un programa de desarrollo para el sector, incluyendo a la industria y proveedores”.

Por otro lado, el analista Enrique Martínez Moreno, vicepresidente del Instituto de Investigación e Innovación Farmacéutica (IIF), refirió en entrevista que lo relevante de las conversaciones es que la industria ya no tiene sólo una visión exclusiva de salud, “ya se ve la contribución de la industria a la economía, con una dimensión interesante en el desarrollo industrial”.

Agregó que la industria farmacéutica se encuentra entre los 10 principales impulsores del crecimiento del PIB, detrás del consumo interno, el sector automotriz, petrolero y de telecomunicaciones.

“Es un gran avance que se le dé a la industria farmacéutica un valor productivo con complementos legales y de capital humano, más que sólo de abastecedora de producto”, explicó Martínez Moreno.

Ante este panorama, José Narro Robles, titular de la Secretaría de Salud, exhortó por la solidez de una política industrial en el sector, “la industria farmacéutica es un sector prioritario y estratégico para el país”.

Dagoberto Cortés, presidente de la Anafam, indicó que en la actualidad la industria farmacéutica establecida en México es sólida y está en franco crecimiento.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la industria farmacéutica aportó, en promedio, 4,1% al PIB manufacturero, en las últimas dos décadas.

Hasta 92% de los insumos son importados

farmaceutica

Dólar caro pega a laboratorios

La industria farmacéutica nacional se ha visto altamente afectada por la volatilidad en el tipo de cambio, debido a que 92% de los principios activos que utilizan para fabricar medicamentos en México son de importación, dijo Dagoberto Cortés, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Medicamentos.

El directivo dijo a El Economista que en los últimos 14 meses el tipo de cambio se ha incrementado 35%, monto que ha sido absorbido por la industria en la compra de los insumos, porque los precios de los productos en las farmacias no han aumentado en esa proporción.

Hasta el momento han hecho frente al tipo de cambio “mediante la compra de más altos volúmenes, pero no estamos tranquilos con una dependencia como ésa; por ello estamos trabajando por tener una industria farmoquímica como en los años 80, cuando la industria farmoquímica nacional proveía más de 80% de los principios activos que se utilizaban en México”.

Adelantó que conversan con las secretarías de Economía, Hacienda y Salud para implementar una estrategia de resurgimiento de la industria farmoquímica en México, de manera que “las compañías farmacéuticas nacionales puedan tener la tranquilidad de no depender del extranjero”.

Para el analista Enrique Martínez Moreno, vicepresidente del Instituto de Investigación e Innovación Farmacéutica, hay un potencial en el sector que no se ha terminado de explotar y “el apoyo que facilite la regulación y exportación de productos mexicanos es vital”.

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