Niños blancos recibirían mayor diagnóstico de TDAH

Jueves, 25/08/2016

El trastorno de déficit de atención con hiperactividad solo puede ser detectado por observaciones de adultos como padres y profesores, donde también influyen percepciones culturales. 

Reuters. Los niños afroamericanos e hispanos con trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH) pueden ser mucho menos propensos a recibir un diagnóstico o tratamiento que sus compañeros blancos en Estados Unidos, sugiere un estudio hecho en el país.

Los investigadores examinaron los datos de casi 4.300 niños cuyos padres participaron en las encuestas sobre los síntomas del TDAH, el diagnóstico y el tratamiento cuando los niños estaban en quinto, séptimo y décimo grado.

Cuando los niños tenían síntomas de TDAH, los padres de los niños blancos eran más propensos a informar que los niños tomaron medicación, informan los investigadores en la revista Pediatrics.

Si bien el estudio no exploró la razón de las diferencias raciales en el tratamiento del TDAH, es posible que los padres no blancos tenían más dificultades con el acceso o la asequibilidad de los servicios de salud mental o la percepción de discriminación los desanimaba a buscar tratamiento para sus hijos, dijo la autora del estudio, la Doctora Tumaini Coker, investigadora de pediatría en la Universidad de California, los Ángeles.

"Nuestros hallazgos sugieren que estas diferencias tienen más probabilidades de infradiagnóstico o la falta de tratamiento en los niños afroamericanos y latinos que sobre-diagnóstico o tratamiento excesivo de los niños blancos", dijo Tumaini por correo electrónico.

"Puede ser que los niños latinos y de raza negra sean menos propensos a informar que toman un medicamento para el TDAH, ya que son menos propensos a ser diagnosticados, o tener sus síntomas reconocidos, o porque cuando se diagnostica, es menos probable que reciban o acepten un medicamentos para el TDAH, "añadió Tumaini.

En general, el 8% de los padres informó que su niño tenía síntomas o un diagnóstico de TDAH en quinto grado, con el 7% de los niños habiendo tomado medicación en algún momento de ese año.

Por décimo grado, los padres informaron que 9% de los niños tenían síntomas de TDAH o un diagnóstico, y el 8% estaba tomando medicamentos.

En la última encuesta durante el décimo grado, los padres informaron de síntomas del 13% de los niños afroamericanos y aproximadamente el 9% de los niños blancos y latinos. los niños blancos también eran más propensos que otros niños a tener un diagnóstico formal TDAH.

Una limitación del estudio es que se basó en los padres para recordar y reportar cualquier síntoma, el diagnóstico o el tratamiento con precisión, señalan los autores.

"Este estudio carece de un diagnóstico objetivo o tratamiento para obtener información más detallada sobre los medicamentos prescritos y la adhesión a los protocolos de tratamiento del TDAH y, lo que impide un apoyo más definitivo para la hipótesis de que la juventud negra y latina están tratados con deficiencia", Sean Cleary, un investigador de salud pública en la Universidad George Washington en Washington, DC, que no participó en el estudio, dijo por correo electrónico.

Parte del desafío, también, es que no hay prueba sencilla de laboratorio para el diagnóstico de TDAH, señaló José Raiker, un investigador en el Centro Internacional de la Universidad de Florida para Niños y Familias en Miami.

En lugar de ello, los médicos se basan en parte en los informes subjetivos de los padres y profesores para diagnosticar el TDAH en los niños, Raiker, que no participó en el estudio, dijo por correo electrónico.

"Sabemos que el grado en que las personas se presenta, para la evaluación y el tratamiento, como el informe de los padres y profesores puede verse afectado por una serie de factores tales como el uso de medidas culturalmente insensibles y sesgo en los patrones de referencia para la evaluación y tratamiento", dijo Raiker .

"Estos factores, a su vez, influyen en la probabilidad de que un niñ reciba un diagnóstico de TDAH o algún otro trastorno, como un trastorno de ansiedad o del estado de ánimo, lo que en última instancia afecta al tratamiento", dijo.

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