El desafío de implementar una cultura de transformación ágil en salud

Viernes, 03/01/2020
Por Oscar Cerda, Integration Project manager de SONDA
Oscar Cerda

¿Es posible que, dentro de muy poco tiempo, pacientes y usuarios del sistema de salud accedan a consultas ambulatorias a distancia, o sean operados en “pabellones cibernéticos” supervisados desde un dispositivo móvil por “cirujanos humanos”?

La respuesta es sí, y aunque muchos podrían afirmar que es sólo una visión influenciada in extremis por la ciencia ficción cinematográfica, se trata de avances que están ad portas de hacerse realidad, gracias al uso de soluciones tecnológicas como Inteligencia Artificial, Big Data, Internet de las Cosas,  Analítica Avanzada y 5G, entre otras.

Diversos estudios y especialistas internacionales ya han destacado la importancia de la “revolución de los datos” en la medicina moderna, precisando que salud y Big Data hoy mantienen una estrecha relación que se expresa en múltiples aplicaciones prácticas, especialmente en el campo de la imagenología clínica.

Por ejemplo, la matemática estadounidense y experta en bioestadística, Heather Matti, citó en una exposición realizada recientemente en nuestro país, el exitoso estudio de la Universidad de Stanford sobre clasificación de imágenes de rayos X de pecho mediante Inteligencia Artificial, cuya exactitud superó a la de un radiólogo especialista.

Otra área que puede optimizarse, es la atención ambulatoria de pacientes mediante algoritmos que analicen todo su historial médico (agrupado en una ficha electrónica común), y entreguen información instantánea al médico para ayudarlo a realizar diagnósticos más rápidos y certeros, sin tener que depender de largas y reiteradas entrevistas presenciales.

Incluso en Chile ya hemos sido testigos y protagonistas del impacto positivo que la Transformación Digital y la Inteligencia Artificial aportan a la salud. Algunos porveedores hemos desarrolado un portafolio de soluciones SaaS (Software as a Service), las que permiten, entre otras cosas, la detección de fraudes en Licencias Médicas y Bonos de atención médica, o la aprobación automática de Licencias Médicas. Estas se han implementado exitosamente en los sistemas de salud público y privado de nuestro país, contribuyendo significativamente a la reducción de plazos y costos en la atención de pacientes.

En términos concretos, esto implica eliminar enormes volúmenes de papelería, acortar jornadas de trabajo de médicos contralores, y acabar con una importante cuota de engorrosos trámites administrativos que debían realizar miles de pacientes y usuarios en todo el país. Todo ello se traduce, consecuentemente, en una significativa mejora de su calidad de vida.

A nuestro juicio, estos grandes avances no se traducen en que la tecnología vaya a reemplazar a los profesionales de la medicina, sino que serán una herramienta de apoyo para mejorar la capacidad de diagnóstico, contribuyendo al tratamiento de múltiples afecciones o enfermedades que hoy deben esperar días, o incluso semanas, para disponer de un diagnóstico y tratamiento certero.

En este desafiante entorno digital, que trae consigo cambios que son culturales y van mucho más allá de la mera integración de nuevas tecnologías, es imprescindible que las organizaciones se atrevan a dar a abordar procesos de transformación digital.

Recordemos, además, que todo este proceso debe ser ágil e instantáneo. No podemos detenernos a diseñar soluciones que “podrían ser útiles dentro de dos años”, porque en poco meses ya estarán obsoletas y no serían rentables. Hay que planificar y actuar pensando en lo inmediato, porque la misma velocidad del proceso actual así lo exige.

Para abordar estos procesos, entonces, no se debe buscar únicamente rentabilidad de corto plazo, se debe tener la visión y convencimiento de que estos contribuirán no sólo al bienestar general de la sociedad, mejorando la calidad de vida de las personas, sino a disponer de organizaciones más eficientes, productivas y comprometidas con la salud de sus pacientes, entregándoles un servicio de excelencia.

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