En el país, el Ministerio de Salud dejó de distribuir este medicamento en hospitales y centros de salud por considerar que podían ser abortivos, pero aún puede comprarse en farmacias.

Andina. El uso de la píldora del día siguiente es el tercer método de prevención del embarazo más consultado en Apropo, informó Trixsi Vargas, psicóloga de dicha institución, quien se sumó al pedido del Ministerio de Salud para que se permita distribuirlo en establecimientos públicos.

Vargas recordó que el Anticonceptivo Oral de Emergencia (AOE), conocido como píldora del día siguiente o del día después, es solo para casos de emergencia y comentó que no puede ser posible que solo las mujeres con oportunidades, recursos económicos y educación puedan prevenir un embarazo no deseado.

"El Perú tiene altos índices de violación sexual, esas mujeres deberían tener la oportunidad de recibir gratis una píldora para prevenir un embarazo, así como medicamentos para evitar infecciones de transmisión sexual. No es posible que solo la que tiene recursos pueda comprarlo", comentó en diálogo con Andina.

El Servicio de Orientación en Sexualidad de Apropo brinda alrededor de 3.500 consultas mensuales y, de esa cifra, el AOE es el tercer método más consultado, puntualizó.

Como se recuerda, un fallo del Tribunal Constitucional ordenó que el Ministerio de Salud deje de distribuir el AOE en hospitales y centros de salud por considerar que podían ser abortivos; no obstante, esta restricción no alcanza a las farmacias, donde las usuarias pueden conseguirlo pagando un precio por la píldora.

"O sea que, según el Tribunal Constitucional, cuando la píldora se entrega gratuitamente es mala y cuando se compra (en una farmacia) es buena. Como siempre, la que se embaraza es la que tiene menos oportunidades, menos educación", añadió.

La experta consideró necesario que las mujeres tengan a su disposición estos anticonceptivos de emergencia, pero también que se avance desde los colegios y los hogares la enseñanza de educación sexual.

"Muchas veces la mujer quiere usar un método, pero su pareja no quiere. O deciden cuidarse con el método natural, pero muchas no saben cómo funciona su cuerpo. O a veces tienen una relación no protegida y cuando van a un centro de salud, éste no le da una solución. No puede ser que ahora haya mujeres que se embaracen por falta de información, por falta de anticonceptivos o porque él no quiere usar el método", anotó.

Vargas citó cifras de la encuesta del INEI del 2015 en la que se pregunta a las mujeres embarazadas o con hijos si planificaron su gestación. Según el estudio, la mitad confesó que no lo planificaron o que no querían tener hijos en ese momento sino años después.

"Lamentablemente, en algunos casos vemos como producto de esa situación a chicos maltratados o vendiendo caramelos en la calle; el embarazo sin planificar a veces hace que el círculo de pobreza se mantenga", finalizó.