Con la llegada del invierno también llegan los temidos resfríos y la amenaza de gripe están a la vuelta de la esquina. Un simple estornudo puede desencadenar un efecto dominó que puede provocar contagios en toda la familia.

Pero más allá de la exageración, existen algunas precauciones que puede marcar una gran diferencia para la salud del afectado y de toda la familia.

Lo primero a tener en cuenta es que necesitamos identificar a qué tipo de resfrío nos estamos enfrentando, ya que existen diversas causas del resfrío común y por ende diferentes formas de manejar sus síntomas. Por ello lo recomendable es siempre contar con la opinión de un experto.

Para manejar algunos síntomas como la fiebre y el dolor de cuerpo, el médico general Julio Barrios, recomienda consumir una dosis pequeña de paracetamol, como Kitadol, teniendo siempre en cuenta que no existan contraindicaciones médicas.

El experto también es enfático al recomendar no automedicarse con antibióticos, ya que el daño puede ser mayor al problema.

Pero volviendo al tema de la prevención, siempre será mejor prevenir que curar por lo que a continuación te contamos algunas recomendaciones que deberías incluir en tu rutina.

Lavarse las manos:
Desde temprana edad se nos enseña a lavarnos las manos y es un acto básico que puede ahorrar muchos problemas y contagios. Según el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), cerca del 80% de las infecciones se propagan por tacto.

Si bien no es posible mantener una casa esterilizada, con una familia con manos limpias, las probabilidades de contagio se reducen considerablemente.

Según la Organización Mundial de la Salud este es el proceso de un correcto lavado de manos:

– Mojarse las manos
– Aplicar suficiente jabón para cubrir toda la mano
– Frotar las palmas entre si
– Frotar la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda entrelazando los dedos , y viceversa
– Frotar las palmas de las manos entre sí , con los dedos entrelazados
– Frotar el dorso de los dedos de una mano contra la palma de la mano opuesta , manteniendo unidos los dedos
– Rodeando el pulgar izquierdo con la palma de la mano derecha, frotarlo con un movimiento de rotación, y viceversa.
– Frotar la punta de los dedos de la mano derecha contra la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación, y viceversa.
– Enjuagar las manos.
– Secarlas con una toalla de un solo uso.
– Utilizar la toalla para cerrar el grifo.

Cubrirse la boca y nariz al estornudar:
A la mayoría de las personas se les enseñó a taparse la boca al estornudar y toser, sin embargo, esta no es la forma más higiénica de hacerlo.

La mejor forma es con pañuelo desechable o cubrirse con el antebrazo, cortando el circuito de los gérmenes.

Evitar el contacto con personas enfermas:
No se trata de dejar a las personas afectadas en cuarentena, lo que en una familia puede ser muy difícil, pero si los síntomas empeoraran, se presenta un cuadro de fiebre y la tos se vuelve incesante, lo mejor es que el enfermo se quede en cama y no se transforme en un foco de infección en el colegio o el trabajo.

Llevar una vida con hábitos saludables:
Un sistema inmune fortalecido estará menos expuesto a sufrir contagios, es por eso que los expertos sugieren llevar una vida activa, gozar de una dieta nutritiva y dormir lo suficiente.