Reino Unido planea un impulso para las ciencias de la vida tras el Brexit
El gobierno británico ha reavivado su estrategia industrial, revelada a principios de este año para preparar la economía de Brexit, con planes para impulsar el sector farmacéutico del país a través de nuevas inversiones y colaboraciones público-privadas.
Un informe del sector encargado por el gobierno del inmunólogo y genetista John Bell pidió el miércoles más fondos para la ciencia básica, nuevos incentivos para la manufactura y una mayor cooperación entre las farmacéuticas y el Servicio Nacional de Salud (NHS).
Bell también aboga por la creación de un Programa de Investigación Avanzada de Salud para dirigir proyectos ambiciosos y a largo plazo centrados en tecnologías de vanguardia, como el uso de la inteligencia artificial en el cuidado de la salud o la comprensión de la biología del envejecimiento.
La revisión de Bell, que fue bienvenida por el ministro de negocios Greg Clark y el ministro de salud Jeremy Hunt, será seguida por un "acuerdo sectorial" del gobierno en los próximos meses, actuando sobre sus recomendaciones con compromisos concretos.
La industria de las ciencias de la vida, que emplea a 235.000 personas, es uno de los sectores que el gobierno ha priorizado, junto con vehículos de emisiones ultra bajas, industrias nucleares y creativas. Es además el primero en ver el lanzamiento de un informe sectorial bajo la estrategia industrial.
GlaxoSmithKline, la mayor compañía británica de ciencias de la vida, dijo que un nivel más fuerte y profundo de colaboración entre la industria, el gobierno, el NHS y el mundo académico haría que Gran Bretaña fuera un lugar más atractivo para las farmacéuticas.
Mientras que Gran Bretaña es hoy un centro líder para el descubrimiento de fármacos, su éxito futuro está nublado por la decisión del país de abandonar la Unión Europea, y las compañías farmacéuticas han pedido una transición cuidadosa y en fases para evitar la interrupción.
El presidente ejecutivo de AstraZeneca, Pascal Soriot, dijo que la estrategia de Bell debería "proporcionar un entorno más previsible para futuras decisiones de inversión y garantizar que el Reino Unido permanezca abierto a la innovación mientras se prepara para salir de la UE".
Coincidiendo con el informe, el ministro de Salud Hunt también anunció 14 millones de libras (US$ 18 millones) de nuevos fondos para apoyar 11 centros de investigación de tecnología médica para alentar la colaboración entre el NHS y la industria.
La primera ministra Theresa May anunció en enero su "Estrategia industrial moderna" con el objetivo de impulsar el débil crecimiento de la productividad de Gran Bretaña y estimular la inversión en tecnología e investigación y desarrollo.
Comentarios