La campaña de la vacuna contra la gripe, que este año comenzó más tarde de lo debido por el retraso en la llegada las dosis al país, ha bajado notoriamente la intensidad. Mientras en el mes de mayo la gente demostró una respuesta rápida y comprometida, a fines de junio el interés de los ciudadanos se redujo hasta el punto de preocupar a las autoridades.

Todavía hay disponibles unas 80 mil de las 600 mil dosis que compró el Ministerio de Salud Pública (MSP), y se esperan aplicar, con suerte, antes de que acabe la campaña, a fines del mes de julio. El peligro es que las autoridades advierten un pico de contagio para las próximas semanas.

"La campaña ha sido exitosa porque en los primeros dos meses repartimos la gran mayoría de las vacunas, pero todavía nos sobran dosis que estamos a tiempo de entregar antes de que se produzca el pico máximo de circulación viral previsto para julio", explicó a El Observador Teresa Picón, directora de Inmunizaciones del MSP. Según apuntó, la gente todavía "no tiene la real percepción de la gravedad de esta enfermedad", y ese es el mayor obstáculo para generar conciencia.

"Aún estamos a tiempo. Es necesario que se apuren y no se distraigan porque la circulación del virus va a ser riesgosa en las próximas semanas", alertó la directora.

Picón puntualizó que se trata de una época peligrosa para el contagio del virus y si la gente no toma conocimiento del riesgo, se podrían generar complicaciones en la salud, sobre todo, en personas vulnerables. Especialmente, dijo, en los grupos de riesgo: mayores de 65 años, menores de 5 años, personal de la salud, mujeres embarazadas y personas con cualquier tipo de enfermedad crónica.

Sobre las futuras mamás, Pición sostuvo que es imprescindible la vacunación cualquiera sea el mes de gestación. Los cambios hormonales debilitan el sistema inmunológico de las mujeres, por lo que están más expuestas a contraer la enfermedad. "Además, cuando nazca el bebé, la madre tiene que evitar convertirse en una fuente de contagio de virus, y si ella no está protegida, pone en riesgo también la salud del niño, porque hasta los seis meses de vida no se los puede vacunar", advirtió.

Si bien la vulnerabilidad de estos grupos es determinante, Picón sugirió que todo ciudadano que quiera evitar caer en una gripe, puede impedirlo si recibe el inyectable. Definió como una "mentira y un disparate" la creencia de que esta vacuna en lugar de curar, enferma, e instó a la ciudadanía en general a acudir a los vacunatorios.