Algunos países, como México, Francia y Gran Bretaña, ya aplican impuestos a las bebidas azucaradas y la OMS hizo en octubre de 2016 una recomendación no vinculante para que los gobiernos impusieran un gravamen del 20%.
Las ventas de comida rápida registraron un crecimiento de un 7,5% durante el tercer trimestre en relación a igual período del año anterior, según informó la Cámara Nacional de Comercio.