Algunos aspectos que pueden desencadenar en una mala visión son el tabaco, la mala alimentación, el consumo de alcohol, el colesterol y el uso excesivo de dispositivos electrónicos.
La idea es que con esta plataforma puedan hacer cambios en el estilo de vida y minimizar sus probabilidades de un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular, sugiere un estudio de los Estados Unidos.