Revolucionario: Infecciones virales bloquean significativamente la regeneración del músculo esquelético, huesos y el cerebro

Viernes, 09/06/2017
Lo hacen mediante la disminución del sistema de señalización OXTR y, por lo tanto, interfieren con la duplicación y el mantenimiento de múltiples tejidos.
University of California/Berkeley/Cluster Salud

Mucha gente se siente realmente mal cuando se contagia de una influenza. Y no sólo a nivel de las vías respiratorias. La musculatura y hasta la estabilidad psicológica parecen verse afectadas. Ahora, investigadores de la UC Berkeley han encontrado la explicación a estos efectos inesperados de las infecciones virales.

Los bioingenieros de UC Berkeley descubrieron que las infecciones virales reducen la intensidad de una vía clave de señalización celular relacionada con la curación y la salud del músculo esquelético y del hueso, el bienestar mental e, incluso, la prevención de la obesidad.

La vía de señalización, llamada receptor de ocitocina MAPK, o OXTR, ha sido bien estudiada por su papel en la confianza y el vínculo y más recientemente se encontró que se necesitan para el mantenimiento muscular y la regeneración, que disminuye con la edad.

"Nuestros resultados sugieren que las infecciones virales en general pueden desempeñar un papel en la disminución de la salud muscular y la regeneración, una disminución de la salud metabólica y una menor sensación de bienestar, ya que dependen de una señalización OXTR efectiva OXTR", dijo Irina Conboy, del Departamento de Bioingeniería, cuyo laboratorio realizó el estudio.

El equipo de investigación descubrió estos efectos no tan obvios de la infección viral mediante el estudio de un método estándar para insertar genes dentro de las células y los organismos, uno que despliega los virus como herramientas de biología molecular.

Vectores virales de control

Los vectores virales son herramientas utilizadas regularmente por los investigadores para insertar fragmentos de material genético en las células o en los animales para las pruebas adicionales. Para asegurar que cualquier efecto observado de este suministro es causado por el material genético de interés, y no por el del vector viral, un paso experimental clave es probar los efectos de los vectores virales por si mismos. Esto se llama un control experimental, y los vectores probados se denominan vectores virales de control, ya que no se supone que cambien nada en una célula u organismo. Sin embargo, los resultados del estudio muestran que las células y los animales expuestos a vectores virales de control difieren de los organismos no expuestos de varias maneras.

Los investigadores de Berkeley descubrieron que los vectores virales de control realmente cambiaron la intensidad de la señalización OXTR, lo que disminuyó la capacidad regenerativa de cualquier descendiente directo de estas células o tejidos, con lo que los envejecía rápidamente.

En un experimento, OXTR disminuyó en un 70% en células musculares humanas y de ratón, in vitro, que recibieron los vectores virales de control. Los investigadores vieron un efecto similar en ratones vivos.

Los investigadores entonces probaron cómo una vía regulada por OXTR afectó a las células musculares, y encontraron que los vectores virales de control disminuyeron la proliferación de células de músculo de ratón de 85 a 20%; y que las células también perdían un marcador clave de la proliferación de células madre musculares.

"Nuestro estudio implica además que las infecciones virales pueden desempeñar un papel en la disminución de OXTR y, por lo tanto, interferir con la regeneración y el mantenimiento de múltiples tejidos", dijo Conboy.

Los investigadores también examinaron una base de datos de estudios en humanos y encontraron que OXTR se reduce gravemente en humanos después de infecciones virales en comparación con individuos sanos.

Los datos del estudio sugieren que, además de las manifestaciones patológicas conocidas, la infección viral puede desempeñar un papel menos directo en la disminución de la salud y la regeneración del músculo esquelético, el hueso, el cerebro y el bienestar psicológico y la inducción de la obesidad, alterando las redes celulares de señalización que regulan el mantenimiento homeostático de los tejidos.

"Ahora estamos trabajando en una mezcla terapéutica que debe aliviar este daño colateral de infecciones virales y este trabajo en progreso es prometedor", dijo Conboy.

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