Los drones son una tecnología que cuando recién apareció en mercado su uso no parecía del todo claro: ¿Era un juguete, una cámara o un posible repartidor volador? Los años demostraron que la repuesta es todas las anteriores. Y sus usos en el mundo de la salud no podían faltar.

El caso más exitoso al momento es el de la compañía de repartos UPS en Estados Unidos que cuenta con las aprobaciones para transportar medicinas e incluso pruebas clínicas entre hospitales del país. Pero América Latino no se queda fuera.

En México, la compañía Sincronía Logística se propuso ser la primera en implementar esta tecnología en el país con fines médicos. Hoy ya pueden operar en el Hospital Bicentenario en Ciudad de México, trasladando material de ortopedia, como los necesarios para operación de columna, cadera y otras cirugías de alta especialidad. Además, incluyen la entrega de medicamentos.

Este año se logró el primer envío, pero no se detienen aquí. La compañía ya planea la expansión a más zonas del país. El Proyecto Manager, Diego García, nos explica en entrevista con Cluster Salud cómo ha sido el despegue de la compañía.

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-¿Antes de comenzar con esto tenían alguna experiencia en la materia?

-Esta es la primera vez y hasta donde tenemos entendido somos los primeros en México en implementar algo como esto, incluso un documento notariado que nos acredita como los primeros. Como algo experimental fue la primera vez para nosotros, esto es un proyecto de dos años medio hasta hoy.

-¿Hubo alguna institución pública o privada con la que hayan trabajado o fue un desarrollo solamente de ustedes?

-El modelo como tal es un modelo interno de nosotros, todo el desarrollo del modelo de negocio es interno.

Pero para comenzar a realizar las entregas sí nos ayudó el ISSSTE (Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado) que es una institución gubernamental, para implementar la primera fase de entregas y evaluar la viabilidad del modelo de negocio.

-¿Por qué llegaron a la idea de utilizar drones en la salud?

-Derivado de un proyecto de cambiar nuestros modelos de distribución y poder hacerlos más eficientes nos encontramos con las ideas que se han utilizado a nivel global hoy.  Y el proyecto más importante a nivel global, en el rubro de las entregas, es la entrega con dron.

Ahí nos pusimos a investigar y vimos los proyectos de UPS de EE.UU., incluso aprobado por la FDA. Nosotros queríamos ser de los países pioneros para implementar esta tecnología. Solo 26 países a nivel global están implementando esto en el área de la salud y nosotros ahora somos el 27.

-¿Qué dificultades tuvo la creación de este sistema de entrega?

-Todas las inimaginables. Como no hay una referencia a nivel global fue muy experimental, literal desde cero y nos pusimos a investigar cómo podíamos hacerlo viable. Aquí entró el ISSSTE también, cuando hicimos el modelo de negocio, adaptaciones al dron, vimos qué productos entregar y ellos dijeron que hiciéramos las pruebas con ellos. Fue un método experimental y con todas las fallas posibles de este proceso de dos años y medio.

-¿Fue más trabajo planear el modelo de distribución o modificar los drones?

-Nuestro proveedor es Dji, la compañía número 1 a nivel global, y el modelo del dron es el de ellos y le hicimos modificaciones y las adaptamos a nuestras necesidades muy específicas, algo así como un frankenstein.

Pero adicional a eso, algo no tan difícil, pero necesario fue alinearnos nosotros internamente como compañía y también con el sector público que nos ayudó e inclusive tuvimos contacto con la agencia de aeronáutica. Fue un proyecto institucional y fue necesario alinear a varias agencias e instituciones, que es otro reto.

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-¿Y hay planes de expandir?

-La idea es llevarlo a nivel nacional tanto en instituciones públicas y gubernamentales. Todas las personas que se quieran unir al proyecto serán bienvenidas, pero la idea es implementarlo a nivel masivo a nivel nacional en México.

-¿Cuáles son los principales beneficios de esto?

-La primera es que nosotros estando en la CDMX sufrimos de ser la ciudad más congestionada del mundo, los tiempos de traslado para nosotros son horas para moverse de un punto a otro. El beneficio inmediato con los drones es el tiempo de entrega, que lo logramos reducir en el 85%. Eso para nosotros, cuando estamos enviando material para cirugía es vital, porque al reducir el tiempo de entrega ayudamos a salvar una vida.

-¿Qué resultados han visto en el lugar donde ya se implementó?

-Además de poder reducir los tiempos de entrega, tenemos acceso a zonas remotas. Cuando se necesita llevar a zonas no tan urbanas, el dron ayuda a hacer la entrega. Hay algunas clínicas en zonas rurales que en casos de mal clima, lluvias o deslaves, se complica llegar y los drones ayudan en esta parte.

-¿Hay medidas de seguridad que se tomen? ¿Qué tan confiable es el sistema?

-Absolutamente confiable porque la agencia de aviación civil nos exige documentación que avala la seguridad de lo que estamos haciendo. son ciertas pruebas de aeronavegabilidad. Es el mismo proceso que se aplica para un helicóptero, se aplica para los drones. La suerte en nuestro caso es que Dji ya tiene certificados de la Unión Europea, por su diseño, que también fue entregado dentro de la documentación a la agencia en México.

-¿Cómo han reaccionado a la idea hospitales e instituciones de la salud?

-Les ha encantado, a todos quienes se los hemos presentado, les ha gustado. Los envíos con drones en su mayoría a nivel global están enfocados en transporte de bienes, libros, productos comerciales o comida, pero al tratar el tema de salud, esto es diferente. 

Para futuro incluso nos gustaría utilizarlo para tratar emergencias. En lo que llegan los equipos de emergencia al lugar, nosotros podremos enviar drones. Para ellos y nosotros, el envío con drones es una herramienta que nos ayudará a salvar vidas. 

-¿Hay algún tipo de cuidado especial que no se encuentra al transportar otro tipo de elementos?

-Claro, todos estos dispositivos y medicamentos necesitan un tratamiento especial. Inclusive, con el transporte terrestre se toman ciertas medidas. No es lo mismo trasladar una pizza que un trasplante. 

-¿Y ya hay planes de expansión?

- Sí, claro. Pero todo eso está aún en un plano confidencial, no podemos decir dónde. Además daría información a la competencia.

-¿Y se está formando una competencia? ¿Hay un mercado para estas entregas?

-Hasta el día de hoy no. Es un proyecto en el que quien quiera empezar le tomará años. Nosotros ya llevamos casi 3 años adelantados de ellos. Por el desarrollo completo y por el trabajo con todas las instituciones necesarias para lanzarlo. No es solo contar con el dron, sino con todo ese proceso de años.

-¿Cree que este tipo de entrega se comenzará a expandir eventualmente por América Latina?

-A nivel regional, si mal no recuerdo, con México somos solo dos o tres países que tienen algo similar. Pero en Europa y América del Norte para los próximos 4 o 5 años se espera que esta tecnología a nivel legislativo se apruebe y se lance de manera más masiva. Ahora la parte más restrictiva es lo legislativo, la legislación de cada país limita bastante el uso de los drones para evitar problemas de seguridad. Mientras se vaya ampliando la legislación, se irá ampliando como lo que hizo UPS en EE.UU., pero son procesos muy largos.