El estado de Nueva York demandó el martes a Purdue Pharma LP, acusando al fabricante de OxyContin de fraude y engaño generalizados en la comercialización de opiáceos y contribuyendo a una epidemia en todo el país que ha matado a miles.

El estado culpó a Purdue por ejecutar lo que llamó un esquema imprudente por décadas para engañar a médicos y pacientes al exagerar la capacidad de los opiáceos para mejorar la función corporal, minimizando el riesgo de adicción.

Esto permitió que Purdue, de propiedad privada, aumentara su número de recetas y ganancias, a costa de vidas perdidas y "devastación" en comunidades ahora "inundadas" de analgésicos, según la denuncia presentada en el tribunal supremo estatal en el condado de Suffolk.

"La epidemia de opiáceos fue fabricada por distribuidores inescrupulosos que desarrollaron una industria de US$ 400.000 millones bombeando la miseria humana en nuestras comunidades", dijo el gobernador Andrew Cuomo en un comunicado.

"Esta demanda envía un mensaje claro (a aquellos) que engaña al público para aumentar sus márgenes de ganancia que lo haremos responsable", agregó.

En un comunicado, Purdue negó las acusaciones de Nueva York, pero dijo que compartía las preocupaciones del estado sobre la "crisis de los opiáceos".

La compañía con sede en Stamford, Connecticut, dijo que la Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. "Continúa aprobando" la información científica y médica que ha proporcionado a los médicos.

Nueva York busca imponer multas civiles, recuperar ganancias y obtener otros daños, incluso para crear una presunta "molestia criminal".

Purdue vendió US$ 1.740 millones de OxyContin en 2017, según Symphony Health Solutions.

Los fabricantes y distribuidores de opiáceos se enfrentan a cientos de demandas por parte de estados, condados y ciudades de EE.UU. que los acusan de utilizar el marketing engañoso para vender los analgésicos.

Nueva York se unió al menos a otros 26 estados de EE. UU. y Puerto Rico para demandar a Purdue por los opiáceos.

Connecticut no se encuentra entre esos estados, pero ha sido parte de una coalición de 41 estados que investiga la industria de los opiáceos. Algunas de sus ciudades más grandes, incluidas Bridgeport, New Haven y Waterbury, han demandado a Purdue.

En enero, la ciudad de Nueva York presentó su propia demanda en busca de US$ 500 millones de Purdue y otros siete fabricantes y distribuidores de opiáceos para combatir la crisis de opiáceos allí.

Los opiáceos, incluidos los analgésicos recetados y la heroína, desempeñaron un papel en un récord de 42.249 muertes en EE.UU. en 2016, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU.

Esto incluyó al menos 3.086 muertes en el estado de Nueva York y más de 1.100 en la ciudad de Nueva York.

En 2007, Purdue y tres ejecutivos se declararon culpables de haber falsificado la marca de OxyContin y acordaron pagar US$ 634.5 millones para resolver una investigación del Departamento de Justicia de los EE.UU.