Verily, el negocio de ciencias de la vida de Alphabet Inc, dijo que estaba lanzando un estudio de cuatro años con cerca de 10.000 participantes para comprender cómo las personas pasan de estar sanos a enfermar, e identificar factores de riesgo adicionales para las enfermedades.

Verily se está asociando con Duke University y Stanford Medicine en los Estados Unidos para inscribir a participantes de diferentes orígenes en sitios en California y Carolina del Norte dentro de los próximos meses.

El estudio es la primera iniciativa de Project Baseline, un esfuerzo más amplio para desarrollar una referencia, o una "línea de base", para lo que se refiere a "salud".

El estudio recogerá datos, así como muestras biológicas tales como sangre y saliva.

Los sitios recogerán datos de los participantes a través de visitas clínicas repetidas, un reloj de pulsera que monitorea la frecuencia cardíaca y los niveles de actividad, así como la participación en encuestas.

"El estudio del proyecto Baseline tiene la oportunidad de influir significativamente en nuestro cuerpo actual de conocimiento mediante una mejor comprensión de los indicadores de bienestar", Nancy Brown, directora ejecutiva de la Asociación Americana del Corazón, dijo en un comunicado.

"El resultado de este estudio podría inspirar una nueva generación de herramientas que estén orientadas a la prevención de la enfermedad en lugar de sólo el diagnóstico y el tratamiento", añadió.

Más allá de este estudio inicial, el proyecto también probará y desarrollará nuevas herramientas y tecnologías para acceder y organizar la información de salud.

En septiembre, la compañía farmacéutica Sanofi SA y Verily dieron a conocer una inversión de US$ 500 millones en una empresa conjunta que combina dispositivos con servicios para mejorar la atención de la diabetes, un ejemplo de crecientes vínculos entre los sectores farmacéutico y tecnológico.

Verily también tiene varios otros proyectos médicos en transcurso, incluyendo el desarrollo de una lente de contacto inteligente en asociación con la farmacéutica suiza Novartis AG que tiene un sensor de glucosa incrustado para ayudar a controlar la diabetes.