Brasil se quejó el jueves de que Venezuela no hace nada para detener la propagación de un brote de sarampión en la mayor economía de Sudamérica y otros países vecinos, provocado por el éxodo de venezolanos que huyen de la crisis económica.

Desde febrero, cuatro personas -tres de ellas venezolanas- han muerto por sarampión en el remoto estado fronterizo brasileño de Roraima, donde las autoridades sanitarias han confirmado 281 casos de la enfermedad, en su gran mayoría en niños.

El brote ha generado que el Gobierno brasileño lance una campaña nacional para vacunar a 11 millones de niños, además de a adultos que lo requieran. Aunque muchos niños brasileños están vacunados contra la enfermedad, la tasa de inoculación ha caído desde que el país fue declarado libre de sarampión en 2016.

El ministro de Salud Gilberto Occhi afirmó que Venezuela ha ignorado la asistencia y las vacunas ofrecidas por Brasil y no ha contestado los pedidos de información para evaluar la extensión de la epidemia.

"Necesitamos saber cuál es la política de Venezuela y qué ha hecho para vacunar a su población, y también qué hacen otros países", aseguró Occhi en una conferencia telefónica con medios extranjeros.

El Ministerio de Información de Venezuela no respondió inmediatamente pedidos de comentarios.

Occhi comentó que Brasil evalúa vacunar a los alrededor de 2.000 venezolanos que ingresan al país cada día, de los cuales cerca de la mitad están en tránsito o realizan una visita corta. Actualmente, sólo los que solicitan quedarse como refugiados o residentes son vacunados.

Brasil, junto con Colombia y otras naciones vecinas, han estado discutiendo la necesidad de que Venezuela entregue información actualizada a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), aseguró un funcionario.

"Todo lo que tenemos son datos preliminares de 2017. No están actualizando la información y no podemos ver la magnitud del problema", dijo Carla Domingues, jefa del programa de inmunización de Brasil.

La OPS afirmó el mes pasado que habían sido reportados cerca de 2.500 casos confirmados de sarampión en América en 2018, más de 1.600 de ellos ocurridos en Venezuela y cerca de 700 en Brasil.

Un decreto del estado de Roraima que ordenaba la vacunación obligatoria general de los venezolanos fue anulado por la corte suprema esta semana.