En la actualidad, son muchas las entidades que a nivel nacional e internacional, como es el caso de la Organización Mundial de la Salud (OMS), promueven un cambio en el estilo de vida de las personas, con el propósito de disminuir los factores de riesgo de este tipo de enfermedades. Sin embargo, la tasa sigue creciendo de manera exponencial.

El accidente vascular encefálico (ACV) y el infarto agudo al miocardio (IAM), se posicionan como los episodios más recurrentes y éste último se caracteriza porque su principal síntoma consiste en un dolor intenso en el pecho, el que muchas veces se manifiesta como una opresión que se irradia a los brazos y, en otras ocasiones, puede trasladarse al cuello y espalda.

El cardiólogo coordinador de la Unidad de Terapia Endovascular de Clínica Vespucio, Dr. Diego Godoy, sostiene que “el infarto se produce cuando se obstruye de forma brusca y rápida un vaso sanguíneo del corazón. Como consecuencia de esto, se produce una interrupción del flujo de la sangre y la posterior muerte de una parte del músculo de este órgano, ya que al carecer de oxígeno durante mucho tiempo, el tejido de esa zona no se vuelve a regenerar”.

De la misma manera, el profesional puntualiza que las arterias coronarias acumulan colesterol al interior de sus paredes en forma de placas. “Estas van creciendo a medida que pasa el tiempo, dificultando el paso de la sangre, lo que desencadena finalmente un infarto”, asegura el especialista.

Señales de alerta

El síntoma más importante es el dolor torácico intenso y prolongado. El cardiólogo de Clínica Vespucio explica que, adicionalmente, se pueden presentar otros signos, por lo que es importante estar atentos en caso de lo siguiente:

• Dificultad para respirar
• Dolor en el pecho que se extiende al cuello o la mandíbula.
• Sudoración
• Palidez
• Mareos
• En otras ocasiones podrían aparecer náuseas, vómitos y desvanecimiento.

Factores de riesgo

Godoy, sostiene que es fundamental disminuir los factores de riesgo y, para ello, es necesario suspender el consumo de tabaco, aumentar la actividad física y mantener un control adecuado de enfermedades como es el caso de la diabetes, hipertensión arterial, alteraciones del metabolismo de las grasas y otras.

“Otro aspecto importante a considerar, es la mala alimentación, ya que el sobrepeso y la grasa son enemigos del corazón”, explica el profesional.

Avances en tratamientos

Con el fin de intentar disminuir la mortalidad y realizar un diagnóstico oportuno y precoz, se han desarrollado múltiples estrategias a nivel mundial y en nuestro país.

La terapia endovascular es uno de los procedimientos más avanzados para ayudar a resolver todo tipo de patologías coronarias. Este método abarca el diagnóstico precoz y el tratamiento invasivo oportuno; asimismo y posteriormente al evento, el programa de rehabilitación cumple un papel relevante para el adecuado progreso del paciente.

Según el doctor Diego Godoy, de Clínica Vespucio, esta terapia involucra un tratamiento multidisciplinario con especialistas de diferentes áreas, lo que permite dar una solución de salud integral a los pacientes.

“Esta terapia se realiza a través de una punción percutánea vascular, mediante catéteres y guías que logran alcanzar la zona afectada y, posteriormente se implantan diversos dispositivos para tratar de forma exitosa y permanente una amplia gama de enfermedades cardiovasculares”, concluye el profesional.