El gobierno brasileño anunció que no se hará cargo de los gastos que suponga la retirada de los más de 8.000 médicos que trabajaban en el país en el programa gubernamental Más Médicos y que regresarán a la isla caribeña tras el intercambio de acusaciones entre el presidente electo Jair Bolsonaro y el gobierno cubano.

En una rueda de prensa, el ministro de Salud brasileño, Gilberto Occhi, aseguró que el hecho de que el gobierno cubano haya decidido romper el contrato para la cesión de médicos de forma unilateral hace que Brasil no tenga que hacerse cargo de los gastos que suponga su regreso al país.

"Según el acuerdo, los médicos cubanos tendrían derecho a billetes de avión de regreso, vacaciones y todo lo demás. Sin embargo, la decisión de terminar el contrato fue tomada de manera unilateral por el gobierno cubano, que por lo tanto se hará cargo de todo el gasto", afirmó Occhi, quien dejó claro que la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) y el gobierno federal no participarán en la retirada de los galenos cubanos.

"Los médicos cubanos están dejando el país. Los que ya estaban de vacaciones o de permiso ya no regresarán. Por lo tanto, esa salida es gradual. Esta no es una decisión brasileña, sino del gobierno cubano, y por lo tanto Brasil no asumirá ningún tipo de gasto por la retirada de los cubanos", dijo.

El gobierno cubano anunció la semana pasada que retiraría a sus médicos del programa gubernamental Más Médicos tras las criticas del presidente electo Jair Bolsonaro, quien exigió que los galenos cubanos pasen por un examen de revalida, igual que el resto de médicos extranjeros que participan en el programa.

Bolsonaro también criticó en los últimos días que los médicos cubanos reciban apenas el 30 por ciento de su sueldo, y que el 70 por ciento restante sea para el gobierno de Cuba.

El programa Más Médicos fue creado en 2013 por la entonces presidenta Dilma Rousseff para suplir la carencia de médicos en los municipios del interior del país y en las regiones más aisladas.

El programa facilitó que miles de galenos de otros países pasaran a ejercer en Brasil, algo que levantó una gran polémica en la época por la resistencia que opusieron las principales entidades médicas brasileñas.

Desde la creación del programa, Cuba fue el país que más médicos envió a Brasil, a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), con cerca de 20.000 profesionales isleños, que han tratado a 113,3 millones de pacientes brasileños, según datos oficiales del gobierno.

Según la Confederación Nacional de los Municipios (CNM), la salida de los médicos cubanos de Brasil dejará sin atención médica a 28 millones de personas.