José Maria Carretero: “La IA aplicada a sistemas de información de salud está tomando cada vez más protagonismo”

Jueves, 15/02/2018
El Healthcare Senior Consultant en everis cree que la inteligencia artificial puede ayudar a dictaminar mejores decisiones clínicas, a partir del aprendizaje desde el análisis de grandes volúmenes de datos.
Cristián Yáñez W.

La inteligencia artificial (IA) constituye probablemente el futuro de la medicina, gracias a los enormes avances que vemos a diario con nuevas técnicas, robots o dispositivos que vienen a mejorar la calidad de vida de los pacientes. Así surgen asistentes virtuales, vehículos autónomos, sistemas de aprendizaje como el machine learning, entre otros. José Maria Carretero, Healthcare Senior Consultant en éveris, destaca las potencialidades de la IA en el futuro y cómo será de gran apoyo para la salud.

- ¿Cómo influye la IA en la salud?

- La IA aplicada a sistemas de información de salud está tomando cada vez más protagonismo dentro del sector y de la industria. Principalmente la IA puede ayudar como soporte a la decisión clínica, ayudando a los profesionales a tomar la mejor opción en el menor tiempo, a partir del aprendizaje desde el análisis de grandes volúmenes de datos. Algunos casos concretos pueden ser por ejemplo algoritmos de clasificación que analizan y correlacionan grandes volúmenes de datos de pacientes y como resultado lograr hacer un assessment del riesgo de padecer determinadas patologías concretas, como un paso de más valor a las escalas de riesgos tradicionales.

- ¿Cree que la IA será parte esencial de la industria sanitaria en el futuro?

- Lo creo firmemente, no sólo la IA apoyada sobre el paradigma bigdata, sino también el Internet de las cosas (IoT) para adquirir datos provenientes de diversos dispositivos, o la telemedicina aplicada al cuidado en remoto de los pacientes, ya estén en su casa (homecare) o en algún centro de especialidades más pequeño donde reciban cuidados desde un hospital de referencia. Estoy convencido de que la era que nos tocará vivir será apasionante en este sentido.

- ¿Podrían reemplazar las máquinas ciertas acciones que realizan los profesionales de la salud?

- En mi opinión una máquina jamás podrá reemplazar a un profesional de la salud, ya que en las personas está el componente humano que es esencial para el cuidado de los pacientes. En palabras de nuestro director médico, el Dr. Eduardo Vigil, lo que las máquinas ayudarán cada vez más, es a optimizar el tiempo de los profesionales de salud, al facilitarles información procesada fácil de comprender para que puedan actuar con más rapidez y también ejecutarán cada vez más tareas repetitivas. Todo ello le permitirá a los profesionales dedicarse más a la atención y cuidado de los pacientes, y encontrar respuestas a algunos problemas que aún no ha solucionado la medicina.

- ¿Cómo se puede usar el bigdata en beneficio de los pacientes y su cuidado?

- El bigdata nos brinda la capacidad de procesar enormes cantidades de datos en poco tiempo o incluso a tiempo real. Aplicado a la sanidad, el bigdata es una herramienta para el análisis y la monitorización exhaustiva de pacientes, cuyo principal beneficio es la proactividad en los cuidados, es decir, detectar posibles situaciones de riesgo y adelantarnos a lo que pueda ocurrir a un paciente para poder prevenir posibles enfermedades, o bien tratarlas a tiempo para que puedan ser curadas.

- ¿Cree que el bigdata o la IA pueden ayudar a prevenir la aparición de ciertas enfermedades como el cáncer?

- Estoy totalmente convencido, no sólo para prevenir su aparición, sino también para una detección precoz y para adquirir mayor conocimiento sobre cómo tratarlo. La capacidad de análisis, integración e interpretación de datos que nos da el bigdata es ideal para procesar datos genómicos, integrarlos con datos de hábitos de vida, antecedentes o incluso con los patrones medioambientales donde vivimos las personas, lo que hoy se llama epigenética. Este nivel de integración de información no sería posible sin bigdata.

ehCOS SmartICU

Carretero es también Proyect Manager de ehCOS SmartICU, un sistema donde en tiempo real se pueden generar alertas que predicen con una alta probabilidad, un episodio crítico, un tiempo antes de que se produzca, como en el caso del shock séptico, donde los datos se convierten en alertas que anticipan la alarma

- ¿Cómo funciona ehCOS SmartICU?

- Lo que hace ehCOS SmartUCI es capturar de forma automática los datos del paciente, y mediante un módulo de bigdata, analizarlos rápidamente de forma integrada, mostrando la información de una manera comprensible que facilite su interpretación, lo que ayuda a los intensivistas a tomar decisiones mucho más precisas y oportunas y predecir situaciones de riesgo para el paciente. El sistema integra todos los datos del paciente monitorizado 24h, con los sistemas de información hospitalarios y su historial clínico, poniendo fin a los silos y pérdidas de información que ocurren durante el paso de un paciente por la UCI, lo que aumenta la seguridad y calidad de la atención crítica.

-¿Cómo surge la idea de crearlo?

- ehCOS SmartICU surge como un proyecto de innovación desarrollado por ingenieros de everis y NTT DATA y un equipo clínico de médicos y enfermeras intensivistas, dirigidos por el Dr. Paco Murillo, jefe de los servicios de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, un hospital de referencia para todo el sur de España a nivel medicina crítica e intensiva. Durante más de un año de pilotaje, el sistema se implementó en 4 UCI´s del Hospital y 224 profesionales de salud atendieron 1.258 episodios críticos de pacientes, con ayuda de esta tecnología.

- ¿Se usa este sistema en algunos países de América Latina? ¿Es caro de implementar?

- Actualmente estamos en fase de implementación de un piloto en el Hospital Clínico Regional Guillermo Grant Benavente de Concepción. Esperamos que se comience a utilizar por los profesionales clínicos en marzo de este año. En lo referente al coste de implementación, la tecnología ehCOS con la que está construido SmartICU nos permite una implementación sencilla y fácil de abordar, abaratando costes y esfuerzos desde el minuto uno del proyecto, no sólo a la empresa implantadora sino también al hospital. Este hecho hace que el coste de adquisición del software sea muy competitivo.

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