El Dr. Scott Gottlieb, candidato del presidente Donald Trump para dirigir la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos, ha esbozado medidas que tomaría para desentrañar sus lazos con la industria farmacéutica si es confirmado por el Senado.

En un formulario de revelación de ética presentado ante el Departamento de Salud y Servicios Humanos el martes, Gottlieb dijo que renunciaría a varias juntas corporativas incluyendo a GlaxoSmithKline Plc y a posiciones de consultoría.

Los lazos financieros de Gottlieb con la industria de la salud son extensos. Si se confirma, ha aceptado recusarse de asuntos en los que tiene intereses financieros y ceder sus participaciones en cerca de 20 empresas de salud, en su mayoría pequeñas.

Gottlieb, de 44 años, es ampliamente esperado para ser confirmado, aunque sus lazos farmacéuticos probablemente serán examinados por los demócratas. Durante la última década ha sido socio de New Enterprise Associates, un gran fondo de capital riesgo con inversiones en ciencias de la vida.

También dimitiría de su cargo en la empresa de inversión T.R. Winston & Co, y dijo que no realizaría ningún trabajo de consultoría mientras manejara la agencia o participara en cualquier asunto que involucre a clientes anteriores durante un año después de la última prestación de servicios a un cliente.

Gottlieb, un miembro residente en el think tank conservador Instituto Empresarial Americano, es visto de manera favorable por la industria farmacéutica. Él sería responsable de implementar elementos claves en la recién aprobada Ley del Curación del Siglo 21, la cual llama a la agencia a agilizar el proceso de aprobación de medicamentos.