Chile: Nuevos documentos revelan inéditos antecedentes en caso Masvida

Viernes, 31/03/2017
El exgerente de finanzas de isapre Masvida presentó una millonaria demanda laboral contra la aseguradora.
Bío Bío

El exgerente de finanzas de isapre Masvida presentó una millonaria demanda laboral contra la aseguradora. Documentos a los que accedió BioBioChile, revelan antecedentes inéditos del difícil momento que atraviesa la empresa.

Fue en noviembre de 2013 que el entonces gerente de Finanzas de Masvida, José Adolfo Bäuerle, asegura que advirtió al directorio del holding que el modelo de financiamiento aprobado tenía riesgos, lo que se agudizaba por el fuerte aumento de las cuentas por cobrar que había entre las empresas relacionadas.

La advertencia del ejecutivo, cuya misión era justamente precaver crisis financieras, la hizo en una reunión privada ante el presidente del directorio, Claudio Santander; el gerente general de Empresas Masvida, Erwin Sariego, el gerente general de Masvida Clinical, Víctor Estrada; y Oscar Torrealba, gerente inmobiliario de Empresas Masvida.

Ya entonces Bäuerle subraya en la necesidad de comenzar la búsqueda de un socio estratégico, asegurando el ejecutivo que quienes controlan el holding “hicieron oídos sordos frente a los evidentes riesgos”.

Con este antecedente el hoy exgerente de Finanzas de isapre Masvida da inicio a la demanda de nulidad de finiquito y cobro de prestaciones a la que tuvo acceso BioBioChile y en la que exige el pago de 305 millones 923 mil 990 pesos (US$ 463.357) por años de servicio, además de 28 millones 894 mil 478 pesos (US$ 43.764) por vacaciones proporcionales.

Los montos deberían haber sido cancelados, asegura Bäuerle, junto con los 276 millones 402 mil 661 pesos (US$ 418.643) que su empleador le canceló tras comunicarle el despido a fines del año pasado, por un total de 661 millones 221 mil 129 pesos (cerca de US$ 1 millón), equivalentes a las dos décadas de servicio a la isapre por los 30 millones 480 mil 471 pesos (US$ 46.166) de salario mensual percibido en el último año de trabajo.

El comienzo del fin

En la demanda, José Adolfo Bäuerle asegura que fue tras advertir del colapso de Masvida -junto con la proposición de soluciones- que su relación con el directorio del holding comenzó a deteriorarse.

El gerente de Finanzas agrega que insistió en los riesgos que significaba dejar sin caja a la isapre por financiar la red clínica, puntualmente proyectos mal evaluados o con inversiones ejecutadas muy por encima de lo presupuestado.

“En particular les mencioné reiteradamente la necesidad de contar en las clínicas con presupuesto de inversiones anuales, debido a que (a los centros asistenciales) y particularmente los de Concepción y Santiago se destinaron muchos recursos a compra de equipamientos clínicos, ampliación y adquisición de terrenos aledaños a las actuales clínicas Las Lilas, con el propósito de asegurar su crecimiento futuro…”, puntualiza Bäuerle.

Como gerente de Finanzas, sostiene que en varias oportunidades rechazó solicitudes de crédito a las clínicas El Loa, Universitaria de Concepción, Las Lilas e Inmobiliaria Providencia, todas operaciones solicitadas -dice el ejecutivo- por el gerente de Masvida Clinical, Víctor Estrada, y que terminaban siendo cursadas sólo tras la reiteración de Santander y Sariego.

Desde principios de 2015, los problemas de caja fueron más evidentes, indica Bäuerle, debido al continuo traspaso de dinero a la red clínica, instruyendo incluso Claudio Santander la compra de acciones de Clínica Chillán por mil 700 millones de pesos (US$ 1 millón), sin la disponibilidad real de recursos en la caja.

El ejecutivo denuncia además una comisión de 800 millones de pesos (US$ 1,2 millones) cancelada a la sociedad que asesoró a Masvida en un contrato con Cruz Verde, pagos que se reiteraron, llegando a los 2.100 millones de pesos (US$ 3,1 millones), todos visados por Ulises Figueroa, gerente general de la isapre, Santander y Sariego.

Acoso laboral

En la demanda, Bäuerle relata que fue a partir de este episodio, en junio de 2015, que se terminó su asistencia a las reuniones de directorio de Empresas Masvida y en las cuales había participado en los últimos 17 años, siendo a partir de entonces blanco de recriminaciones y hostigamiento, responsabilizándolo de la crisis económica por la que hoy atraviesa la isapre y que la tiene incluso intervenida.

Hasta el 30 de septiembre de 2016, cuando extraoficialmente conoció de la decisión de desvincularlo, se terminó la comunicación con su jefe directo y el gerente general Ulises Figueroa, entregándose gran parte de sus labores a José Agapito Muñoz, quien llegó a la compañía en febrero del mismo año desde la empresa Auditora EY.

Fue el 5 de octubre cuando Bäuerle recibe de manera formal la carta de comunicación del término de su contrato, con el pago de una indemnización de 304 millones 581 mil 985 pesos (US$ 461.324), monto que finalmente se rebajó a los 276 millones de pesos (US$ 418.033) cancelados y que originó la demanda con la denuncia por acoso laboral.

El Juzgado del Trabajo de Concepción dio lugar al trámite de la acción legal, fijando para el 28 de abril próximo la audiencia de preparación del juicio, aunque rechazando las medidas precautorias que buscaban asegurar el pago de la indemnización solicitada y que incluían la prohibición de vender o traspasar bienes.

José Adolfo Bäuerle es actualmente uno de los blancos de la investigación a cargo del Ministerio Público en Santiago, y donde se busca establecer la eventualidad de que hechos criminales hayan incidido en el caos que tiene actualmente a 500 mil afiliados en la total incertidumbre y sin poder cambiarse a otra aseguradora de salud.

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