Los líderes republicanos en el Senado de los Estados Unidos presionaron este martes para reunir suficiente apoyo para aprobar una ley de salud, pero recibieron poca ayuda de un informe diciendo que la medida haría que 22 millones de estadounidenses pierdan el seguro médico durante la próxima década.

Se esperaba que el vicepresidente Mike Pence se uniera a los republicanos del Senado en un almuerzo político en el Capitolio antes de recibir a senadores conservadores para una cena.

El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, se reunirá con senadores que están indecisos y que se enfrentan a preguntas de sus gobernadores y funcionarios estatales por Medicaid y posibles recortes al programa de seguros gubernamentales para pobres y discapacitados.

El análisis publicado el lunes por la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO por sus siglas en inglés), no partidista, incitó a la senadora Susan Collins, un voto moderado clave, a decir que no podía apoyar el avance del proyecto de ley tal y como está.

Al menos cuatro senadores republicanos conservadores, Ted Cruz, Rand Paul, Ron Johnson y Mike Lee, dijeron que su oposición permaneció sin cambios después del análisis de la CBO.

El objetivo de McConnell ha sido votar la medida antes del receso del 4 de julio que comienza al final de la semana, promoviendo un objetivo republicano de largo plazo de revocar y reemplazar a Obamacare y entregarle al presidente Donald Trump una victoria legislativa.

El líder de la mayoría sólo puede permitirse el lujo de perder dos senadores republicanos de la mayoría de 52 asientos del partido en el Senado de 100 escaños para aprobar el proyecto de ley. Los demócratas se oponen firmemente y Pence buscaría un voto de desempate.

Las preocupaciones superpuestas de los legisladores y los intereses en competencia han presentado a McConnell un equilibrio. A los senadores moderados les preocupa que millones de personas pierdan su seguro. Los conservadores dicen que el proyecto de ley no hace lo suficiente para borrar la legislación nacional del presidente demócrata, Barack Obama.

Pence acogerá a Lee y a otros senadores republicanos conservadores en una cena más tarde el martes. James Lankford, Tom Cotton y Ben Sasse también están invitados, informó Politico.

Collins, Paul y Johnson, junto con el senador Dean Heller, han dicho que se opondrán a una moción de procedimiento para permitir que McConnell avance y traiga el proyecto de ley para una votación.

Heller, un republicano moderado para la reelección del próximo año en Nevada, ya está enfrentando consecuencias políticas después de que un grupo iniciado por ex ayudantes de campaña de Trump y Pence prometieron publicar anuncios en su contra.

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Trump y la mayoría de los republicanos en el Congreso fueron elegidos con las promesas de campaña para reemplazar a Obamacare, una ley de 2010 que extendió la cobertura de seguro a unos 20 millones de estadounidenses a través de medidas como un mandato para individuos para comprar seguros y expandir Medicaid.

Los republicanos han condenado por mucho tiempo a Obamacare como una intrusión costosa del gobierno. Ahora que controlan la Casa Blanca, el Senado y la Cámara de Representantes, la presión es ofrecer una alternativa.

El senador Angus King, independiente, lamentó la falta de liderazgo presidencial para guiar la legislación que dijo que va en contra de las promesas de Trump de asegurar a todos, reducir costos y proteger a aquellos con condiciones preexistentes.

"Él se mantuvo al margen y dejó que estos proyectos de ley se desarrollaran. Él celebró el proyecto de ley de la Cámara, luego dijo que era malo. No creo que él esté entrando en los detalles sobre lo que realmente hacen estos proyectos", dijo King a MSNBC.

Marc Lotter, el secretario de prensa de Pence, estaba optimista de que los líderes republicanos podrían eventualmente lograr los votos necesarios, diciendo que McConnell convocaría una votación cuando "tengan los votos juntos".

"Tendrás gente a cada lado del espectro tratando de hacer ajustes aquí y allá ... pero al final del día verás que los republicanos lograrán esto porque es una misión de rescate para el pueblo estadounidense", dijo Lotter a Fox News.

"El mayor problema de la firma"

La CBO evalúa sólo el impacto de la legislación dentro de un plazo de 10 años y dijo que espera que más de 22 millones de personas pierdan su seguro de salud después de eso, debido a los recortes profundos a Medicaid no programado para entrar en vigor hasta 2025. LA CBO estimó que reduciría el déficit presupuestario en US$ 321.000 millones entre 2017 y 2026.

Si el Senado aprueba un proyecto de ley, o bien tendrá que ser aprobado por la Cámara, que aprobó su propia versión el mes pasado, o las dos cámaras reconciliarían sus diferencias en un comité de la conferencia. De lo contrario, la Cámara podría aprobar una nueva versión y devolverla al Senado.

"Es el mayor asunto de la firma que tenemos, y es la promesa más grande que hemos hecho en la era moderna", dijo el presidente de la Cámara, Paul Ryan, en una entrevista de Fox News que fue transmitida el martes. "Hicimos esto en la Cámara, ahora es el turno del Senado, creo que lo van a lograr".

Defendió las propuestas en medio de las conclusiones de la CBO, diciéndole a Fox: "no es ... que la gente esté siendo expulsada de nuestro plan, sino que la gente decida no comprar algo que no le gusta o quiere".

En su análisis de la legislación de la Cámara el mes pasado, la CBO proyectó que unos 23 millones de personas perderían el seguro de salud durante la próxima década.

Los demócratas siguieron unidos en la oposición, criticando el proyecto de ley del Senado como un recorte de impuestos para los ricos que daña a los más vulnerables de la nación. Pero tienen pocas opciones de bloquearlo más allá de agitar la oposición pública y aumentar la presión sobre los republicanos cautelosos.