Los instrumentos quirúrgicos y endoscopios con bisagras, curvas agudas y lúmenes, presentan un desafío especial para la limpieza y la esterilización, según un reciente estudio.

Nuevas investigaciones buscan mejorar la terapia con "fagos" o desencadenando la autodestrucción bacteriana.

Los bacteriófagos, también llamados fagos, son virus que luchan contra la proliferación de sus bacterias huéspedes fagocitándolas.

El intestino humano está plagado de bacterias. Las heces contienen alrededor de 100.000 millones de células bacterianas por gramo, y las bacterias intestinales superan en número a las células humanas de 10 a 1.

Las bacterias son cada vez más resistentes, ya que se han acostumbrado al poder de los antibióticos y han desarrollado armas para combatirlo.

De acuerdo a un nuevo estudio, la evaluación de la microbiota debería ser un paso en estos procedimientos.

Los resultados de una investigación aportan una nueva visión para el estudio de nuevos fármacos o incluso aumentar la efectividad de los que actualmente se utilizan.

El hallazgo confirma la necesidad de usar una terapia combinada multifármaco que ataque varios mecanismos de resistencia en el ámbito hospitalario.

Un estudio, que también analizó la carne de cerdo en otros tres países, fue realizado por la Universidad de São Paulo en representación de la organización en Brasil y examinó 100 muestras de carne de establecimientos de propiedad de Carrefour, GPA y Walmart, dijo World Animal Protection (WAP).