Abbott

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El dispositivo llamado ID Now ayuda a detectar la influenza en solo unos minutos, agilizando la atención a los pacientes.
El sistema Freestyle Libre realiza una medición constante, evitando las inyecciones de insulina tradicionales.
Con la medida que regulará su costo solo a unos días, algunas de estas medicinas han elevado su precio considerablemente.
De acuerdo a algunos especialistas, las farmacéuticas están apuntando a que los productos sean consumidos por personas que no los necesitan.
El dispositivo permite realizar el implante sin la cirugía a corazón abierto que se realiza desde 1960.
El Departamento de Justicia dijo que Alere, con sede en Massachusetts, entre 2006 y 2012, vendió a los hospitales sus dispositivos con la marca Triage que pagaron los programas de salud del gobierno, a pesar de recibir quejas de los clientes sobre los resultados erróneos que produjeron.
El dispositivo tiene un precio minorista de US$ 70 por lector y US$ 36 por sensor, que dura 10 días.
Minsalud abrió la posibilidad de que los fármacos para combatir esta enfermedad, criticados por su alto costo, sean comercializados por más compañías.
El dispositivo utiliza bluetooth para conectarse al teléfono y enviar los datos al portal en línea.
El negocio de salud del consumidor de Pfizer, cuyas marcas incluyen el analgésico Advil y el protector labial Chapstick, tuvo ingresos de alrededor de US$ 3.400 millones en 2016.
Por Maribel R. Coronel, periodista en temas de economía y salud, para El Economista.
El país ha reducido en los últimos meses los precios de los dispositivos médicos, como los implantes de rodilla y los stents cardiacos, hasta un 75% para hacerlos más asequibles.
Por Julio Pilotzi para El Economista.
La compañía farmacéutica estima esto, debido al rédito que obtuvo de su adquisición de US$ 25.000 millones de St. Jude Medical.
No es la primera vez que el medicamento Depakote le trae problemas. Cuando aún era parte de Abbott, en 2012, la compañía acordó pagar US$ 1.600 millones para resolver reclamaciones federales y estatales.
Por Maribel Ramírez Coronel, Periodista en temas de economía y salud para El Economista.
Lo anterior, luego de detectar la presencia de la bacteria “cronobacter” en un lote de Pediasure Polvo de Abbott, y otro de Leche Purita Calo, de Watts, fabricado en la ciudad de Osorno.